El Aceite de ARGAN Cosmético 100 % natural es puro y sin desodorizar. Además, está indicado para todo tipo de pieles y edades. No contiene conservantes, ni colorantes.

Se puede aplicar en la cara, cuerpo, cabello y uñas. Penetra rápidamente y aporta todos los elementos nutritivos que la piel necesita.

Cuenta con unas propiedades cosméticas, medicinales y nutritivas excepcionales:

SOBRE ROSTRO Y CUERPO: Los beneficios de este aceite son incontables en el tratamiento del envejecimiento de la piel y en la hidratación de pieles secas.

Contiene un fuerte poder REGENERANTE: Nutre e hidrata intensamente la piel y estimula la regeneración celular. Combate el envejecimiento, las arrugas y líneas de expresión, la pérdida de elasticidad y la piel seca y apagada.

Es, además, el ANTIOXIDANTE NATURAL por excelencia: Sus ácidos grasos esenciales y su vitamina E restauran profundamente la piel. Al mismo tiempo, neutralizan los radicales libres responsables del envejecimiento celular.

Igualmente, combate enfermedades como el acné, la psoriasis, las estrías, quemaduras y cicatrices.

SOBRE EL CABELLO: Ejerce un profundo tratamiento nutritivo y reparador sobre el cabello. Actúa, sobre todo, en cabellos secos, difíciles de peinar, quebradizos y dañados por la coloración u otros procesos químicos, la exposición al sol y el peinado con calor.

Regenera y da vida al pelo al tiempo que lo nutre y fortalece devolviéndole su brillo, elasticidad y suavidad natural. Además, ayuda a alisar el cabello o mejorar los rizos naturales.

También es un excelente aliado para aliviar el picor y reducir la sequedad y descamación del cuero cabelludo.

EN LAS UÑAS: Fortalece las uñas debilitadas y quebradizas.

MODO DE UTILIZACIÓN:

ROSTRO: Aplicar unas gotas con suaves masajes circulares. Se absorbe rápidamente y aporta una hidratación profunda.

CUERPO: Aplicado después del baño o ducha con suaves masajes circulares tonifica la piel. En mujeres embarazadas, su uso, da elasticidad a la piel y evita la aparición de estrías.

CABELLO: Masajear el cabello con unas gotas de aceite, de raíces a puntas, y envolverlo media hora en una toalla caliente. En cabellos grasos, solo de medias a puntas. Después, lavarlo de la forma habitual, aclarándolo con abundante agua.

UÑAS: Sumergir las uñas en una mezcla de zumo de limón y aceite de Argán a partes iguales, durante unos minutos.

Envase de 55 ml.